Un equipo internacional de investigadores ha examinado los núcleos de hielo tomados de una isla en el norte de Canadá en la década de 1980 y encontró que las temperaturas del aire durante el Holoceno fueron más altas que hoy.
La capa de hielo antártica. Crédito: Stephen Hudson / Wikipedia
Además, ha habido cambios sin precedentes en la temperatura del aire en la zona durante el último medio siglo. En su artículo publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences, el grupo describe su estudio de los núcleos y por qué creen que puede ayudar a comprender mejor lo que le podría suceder a nuestro planeta debido al calentamiento global.
Las pruebas anteriores han demostrado que el calentamiento global está ocurriendo en diferentes grados en diferentes partes del mundo, y que los mayores cambios están ocurriendo en el Ártico. A medida que el planeta se calienta, los científicos buscan ejemplos del pasado para predecir lo que podría suceder en el futuro. En este nuevo esfuerzo, los investigadores informan que las temperaturas al final de la última edad de hielo (8.000 a 11.000 años atrás) fueron un poco más cálidas de lo que son hoy, lo que sugiere que otros estudios podrían mostrar el impacto que esas altas temperaturas tenían en el resto del planeta.
Los núcleos de hielo fueron tomados de la capa de hielo de Agassiz en la isla de Ellesmere hace varias décadas, pero no fueron examinados a fondo debido a las restricciones presupuestarias. Ahora residen en un sitio en el campus de la Universidad de Alberta, que permitió el acceso del equipo para el estudio. Los núcleos procedían de profundidades tanto como un kilómetro, ofreciendo una mirada al pasado distante.
Los investigadores midieron el hielo que se había derretido y posteriormente se recongeló y los isótopos de oxígeno para aprender más sobre las condiciones del aire durante el tiempo de su formación. El equipo informa que encontraron resultados que emparejaban de los dos métodos que medían, que refuerzan sus resultados. También reportan que en general, sus hallazgos ofrecen más evidencias de calentamiento global que, sugieren, es ciertamente debido a factores humanos — factores naturales, como los que llevaron a un mundo más cálido durante el Holoceno (variaciones en la órbita y la inclinación de la tierra) ocurren a un ritmo mucho más lento.
Los investigadores sugieren que se realicen más investigaciones para buscar cambios producidos por las condiciones más cálidas durante el Holoceno, tanto en el Ártico como en otras partes del mundo, para predecir qué cambios podrían estar por venir.