miércoles, 12 de abril de 2017

¡INTERESANTE! ¿Cómo los osos polares encuentran a sus presas?

Los investigadores encuentran que la respuesta está en cómo está soplando el viento

Fuente: Wikipedia

Investigadores de la Universidad de Alberta han desmitificado la manera en que los osos polares buscan sus presas típicas de focas anilladas. La respuesta resulta, muy simple: ellos siguen su nariz usando el poder del viento.

Usando los datos de telemetría vía satélite recogidos de 123 osos polares adultos en la bahía de Hudson de Canadá durante 11 años, los investigadores combinan los movimientos de los osos polares con los patrones de viento para explorar cómo buscaron focas.

La hipótesis de que cuando un oso huele su presa, se mueve hacia la dirección del viento para encontrarla. Pero ¿qué debe hacer un oso antes de oler nada en absoluto?

"Los depredadores buscan presas usando olores en el aire, y su éxito depende de cómo se mueven en relación con el viento," explicó Ron Togunov, de la Universidad de Alberta alumno y principal autor del estudio. — El viento cruzado que viaja, le da a los osos un suministro constante de nuevos flujos de aire y maximiza el área que puede sentir a través del olor.

Mientras que este fenómeno había sido sospechado en muchos animales, hasta ahora no se había cuantificado en mamíferos.

Las mejores condiciones para la caza olfativa, explicó el profesor Andrew Derocher de UAlberta, coautor y  famoso experto en osos polares, se lleva a cabo en la noche durante el invierno.

"La búsqueda de viento cruzado era más frecuente cuando los vientos eran lentos, cuando es más fácil de localizar la fuente de un cierto olor y en la noche cuando los osos son relativamente activos y cuando la visión es menos eficaz, por lo que los osos se confían más en su sentido del olfato."

Los resultados también plantean cuestiones acerca de las implicaciones del cambio climático.

"Se preveé que las velocidades del viento en el Ártico se proyectan para aumentar, potencialmente haciendo más difícil, el olfato", explica Togunov. "Es importante entender cómo el éxito de caza de osos polares se verá afectado por estas condiciones cambiantes".


El estudio "Windscapes and olfactory foraging in a large carnivore" fue publicado en Scientific Reports en abril de 2017.